Montevideo, Uruguay.
Felicia es de profesión maestra.
Se dedicó a ello durante más de 20 años hasta que optó por retirarse para dedicarse al cuidado exclusivo de su familia.
Formada en el taller de Nelson Ramos, Felicia Vigil (Montevideo, 1972), fue dándole protagonismo al arte en su vida y luego de renunciar a su profesión se dedicó a las expresiones artísticas a través del dibujo, la pintura y la cerámica.
Sus obras son de tenor naíf, ingenuas pero no por ello carentes de sentido y de peso.
Casi que a modo cómo lo hiciera la brasileña Tarsila Do Amaral (San Pablo, 1886-1973), Felicia da vida a su entorno familiar a través de pinturas coloridas de líneas y trazos simple, donde no faltan los elementos que han poblado su vida.
Habiendo nacido en el campo, donde se crío hasta sus primeros años antes de comenzar el colegio, sus recuerdos rurales y su vínculo con el agro, tienen una constante presencia en sus pinturas donde recrea la flora y la fauna autóctona de nuestra país.
Sus pinturas figurativas son de carácter autobiográfico en su mayoría, donde no faltan retratos de mujeres que componen su familia caracterizadas siempre con grandes ojos.
Los ojos en sus retratados, llaman la atención al espectador, punto de atención central visual. Inclusive hubo una época en que sus mujercitas no tenían ni boca ni nariz, haciendo foco solo en los ojos.
A modo de homenaje y de forma consustancial, Felicia lleva a sus telas su historia familiar.
Asimismo parte de sus obras son de carácter religioso representando escenas bíblicas, imagenes de santos así como de la Virgen María en sus diferentes advocaciones.
Junto con su actividad pictórica, Vigil lleva adelante un taller de expresión artística destinada a los niños uniendo sus dos pasiones, cómo maestra y cómo artista. En su local ubicado en Pocitos, da clases de dibujo, pintura y cerámica atendiendo fundamentalmente el libre interés de sus alumnos.
Desde no hace mucho tiempo y hasta la fecha, Felicia viene ocupando espacios artísticos con fuerte presencia en muestras locales e internacionales convirtiéndose en un referente nacional dentro del arte naíf.




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