Cathy Burghi

Pueblo Garzón, Uruguay.

Dentro de las ofertas artísticas del Este, muy tierra adentro, nos encontramos con la propuesta de Cathy Burghi en Black Gallery en Garzón.

Llegar allí resulta alentador, pues casi que en el medio del campo, se encuentra esta galería en una construcción que respeta el entorno, de puertas y ventanas abiertas al paisaje rural.

Es imposible abstraerse del entorno a la hora de apreciar la muestra. La sala a través de sus aberturas da cabida al verde del campo, al cual pertenece, en todas sus tonalidades dependiendo de la hora del día. Eso ineludiblemente también forma parte de la propuesta del artista pues el ámbito ideal de relax nos genera óptimas condiciones para conectar con la obra.

Cathy Burghi nacida en Montevideo en 1980, se formó en la Escuela de Bellas Artes y ha vivido parte de su vida en Francia aspecto que se refleja en el trazo de su obra.

En un abordaje temático femenino y feminista, Cathy va bordando literalmente el hilo conductor de su propuesta. La mujer y su femineidad representada a través de pezones en diferentes formatos, el órgano genital de la mujer símbolo de vida, también de sexo, también de objeto.

La mujer madre, esposa, amante y también fuente de ingreso. La mujer en todas sus facetas muchas veces no valorada, menospreciada como si solo su objetivo fuera servir al hombre.

La sala tiene variedad de obra, pero todas tienen el espacio suficiente entre una y otra necesaria para ser únicas con identidad propia sin dejar de establecer un diálogo, un recorrido que va llevando al espectador a la aprehensión de la sensibilidad de la artista.

Sus obras denotan un reconocimiento y un vínculo con Louise Bourgeois (París,1911-2010), pionera de abordar y llevar la temática femenina a las salas de arte, donde a partir del psicoanálisis logró exteriorizar sus miedos.

También podemos ver en la obra de Burghi reminiscencias de las pinturas de Georgia O’Keeffe (Wisconsin, 1887-1986).

Una muestra que provoca una mirada interna en comunión con el medio, en este caso con el campo, donde tanta mujeres viven y trabajan en algunos caso como si aún lo hicieran en el sXIX.

Titulada Petricor, termino que hace referencia al olor de la tierra mojada, al perfume natural que inspira fertilidad, vida, esperanza, es una de las propuestas más interesantes de la temporada, seguramente.

La muestra curada por Mercedes Sader, galerista, se podrá ver hasta el 20 de enero.

Black Gallery- Paso del Sauce y la Cantera – Pueblo Garzón


Publicado

en

por

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *