Árbol de Raúl Sampayo

Manantiales, Uruguay.

Ayer visité la muestra del célebre escultor inglés Anthony Caro (1924-2013) en el Museo de Arte Contemporáneo Atchugarry (MACA), artista que ha aportado tanto a la escultura internacional a quien seguramente le dedique una nota.

Luego y seducido por el bonito atardecer hice un recorrido entre algunas de las esculturas del parque momento en que estaba llegando bastante gente para asistir a un recital a celebrarse en el anfiteatro del MACA.

Es así que tratando de eludir la cantidad de personas que llegaban terminé accediendo al parking por un camino secundario.

Para mi sorpresa y asombro encontré a la entrada de un ingreso de servicio y casi oculta entre los árboles, una obra escultórica que enseguida reconocí a pesar de lo maltrecha de su estado.

Se trata de una escultura de uno de nuestros destacados escultores como lo es Raúl Sampayo (Melo, 1963), quien tiene una escultura similar en el lobby del hotel Hyatt de Montevideo la cual luce en forma espléndida.

Esta pieza titulada Árbol, fue galardonada en un concurso que se llevó a cabo en el Paseo de Esculturas de la Plaza de las Torres del WTC de Montevideo en 2009 bajo seudónimos, momento en el cual se la distinguió con el Premio Pablo Atchugarry el cual consistió en la adquisición de la misma por lo cual Sampayo recibió 5 mil dólares.

En ese concurso también fueron premiadas esculturas de Bernardo Cardarelli, Santiago Dieste, Carlos López Quagliata, Marina Lema Riqué a la vez que el parque incorporó una escultura de Pablo Atchugarry de gran tamaño titulada Velas del Sur, esculturas que por cierto gozan de mejor cuidado.

Esta triste circunstancia nos conduce a una idea recurrente donde la desidia y la falta de respeto por nuestros escultores se repite en forma constante.

Ejemplo de ello es el Parque de las Esculturas del que fuera el Edificio Libertad que aún espera que algún director de cultura de turno le preste la debida atención y se ocupe de su recuperación antes de que el resto de las obras sean vandalizadas o robadas.

Sin embargo cuesta creer que en un museo privado como es el MACA el cual se precia de ser un museo a cielo abierto destinado a la difusión de escultores tanto locales como extranjeros se dé una situación como esta.

Cuanta tristeza podría llegar a sentir Sampayo al ver el estado calamitoso de su obra la que fuera motivo de orgullo en su momento.

Cabe recordar que las obras de este escultor forman parte de importantes colecciones a la vez que la pieza “Cola de la Ballena Franca” forma parte del paisaje de Punta del Este habiendo sido incorporada como patrimonio por

el público y la cual se ha convertido en un icono del balneario a pesar de que fue trasladada de su emplazamiento original sobre la Parada 35 de la Playa Brava donde lucía en forma estupenda, momento en el cual el paisaje la había incorporado de forma inmediata.

Esa escultura que hoy está emplazada sobre la playa Mansa al ingreso de la ciudad, fue una donación de Sampayo a partir de una convocatoria llevada a cabo en 2019 proveniente de la Comisión de Medioambiente del Municipio de Punta del Este interesada en llevar adelante un proyecto relacionado con el cuidado de la costa.

Es de desear que esta nota despierte el interés y respeto que Sampayo se merece y que Árbol sea restaurada a la vez que sea traslada para ocupar un lugar con la visibilidad acorde a su prestigio.

  • Estado original de la pieza en 2009
  • Cola de la Ballena Franca, Punta del Este

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