Pocas son las posibilidades que tenemos de conocer a nuestros escritores, amén de aquellos que tienen una trayectoria reconocida que generalmente nos viene de fuera del país, o aquellos que tienen presencia mediática.
Cada vez que viajo, en un hábito que cultivo con mucha satisfacción, visito librerías para preguntar por los autores nacionales actuales, en un desafío de formación y conocimiento hacia con el librero.
Es un deleite acercarse a un lugar, a una ciudad, a un país con su idiosincrasia a través de las visiones y relatos de un escritor, mas allá de que están aquellos que prefieren escribir sobre otras realidades diferentes a las propias de su país, lo que también es válido.
El caso de Norma Duarte, doctora en derecho y ciencias sociales, profesora de la Universidad de la República, con una formación muy técnica en abogacía, es uno de aquellos escritores poco conocidos a nivel público nacional, cosa que he comprobado hablando con los libreros, no por ello de menor importancia y que vale la pena conocer.
Escribe desde que tenia 11 años desde obras de teatro, ensayos y ha editado varias novelas entre las cuales, “Adiós, Nostalgia” publicada en 2014 por Artemisa Editores.
La historia discurre en un ámbito montevideano, aunque recorriendo varias ciudades del mundo, en el seno de una familia montevideana con todas nuestras costumbres.
En este caso, Duarte ahonda en el relato del personaje principal, con severos problemas de adaptación al medio, de convivencia con el prójimo en un análisis casi se podría decir propio de un psicólogo, donde va describiendo hechos que componen el perfil endémico del susodicho creando al lector una atmosfera agobiante que nos va obligando a tomar parte en la historia en forma activa.
No es fácil lograr transmitir dichas emociones, sensaciones que hacen al ámbito del lugar provocando posturas al lector ávido de encontrar una salida al caso.
Es destacable asimismo, como el personaje principal, pasa a segundo plano convirtiendo al actor secundario en el protagonista preferido del lector en virtud del sufrimiento y acoso constante provocado por el otro.
Duarte, con una mirada tan sagaz, inquisidora, se entremete en el conflicto personal de sus personajes, de una forma muy sutil tejiendo poco a poco una red conflictiva que involucra a las partes, tarea que no es nada fácil de crear.
El lector va tomando parte en la historia, relajándose en ciertas instancias de relatos de viajes, entre algunas ciudades que la novela recorre como es el caso de Estambul, Berlín o Budapest, con descripciones detallados en forma exhaustiva, pero siempre atento al problema de fondo que subyace en toda la trama.
Una escritora muy inteligente, con un relato profundo que vale la pena acercarse para conocer en una novela atrapante.
Novelas de Norma Duarte: Jorge y sus interpretes (2009), El club de las damas perversas (2009), Las profetisas de México (2010), Un hombre, un gato y el miedo (2012), A las puertas del señorío (2012) entre otras.
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