Ambientada en París cuando estuvo dominada por el ejército nazi en 1942, está película con casi nada de agresión aparente, nos mantiene alertas y tensos desde principio a fin.
Tampoco existen largos diálogos pues el miedo dominante obliga a los protagonistas a un silencio atroz.
Un joyero judío debe de sobrevivir frente a las amenazas del avance nazi, ocupándose de dar prioridad a su familia.
Las vicisitudes de los hechos, lo obligan a cambiar de planes llevándolo a ocupar otros roles laborales habituales en su vida.
El film de carácter conmovedor, nos demuestra una vez más que en situaciones límites desconocemos lo que somos capaces de llevar a cabo con el propósito de sobrevivir.
También podemos adoptar posturas que antes despreciábamos en los otros.
No existen las personas buenas ni malas, son las situaciones que nos tornan, dependiendo de las circunstancias que nos tocan vivir y cambiamos de bando con gran versatilidad.
Dirigida por Fred Cabayé (Rennes, 1967), quien goza de gran prestigio, está llevada a cabo en casi dos horas, donde la tensión llevada al extremo, es la característica que prevalece desde el minuto cero.
Estamos deseando que termine a la vez que no queremos dejar de verla.
Las actuaciones de sus pocos protagonistas no tienen fisura alguna.
Daniel Auteuil, el más conocido, actúa con magistralidad, pero tampoco Guilles Lellouche y Sara Giraudeau se quedan atrás.
La película fue estrenada en 2021 y seguramente será merecedora de varios premios.




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