São Paulo, Brasil.

La Pinacoteca del Estado de San Pablo en Brasil, fundada en diciembre de 1905, es uno de los museos de mayor prestigio dentro del país.

Desde fines del 2020, la Pinacoteca ubicada en la Estación Luz, cuenta con un repertorio nuevo donde las obras se encuentran agrupadas a partir de temáticas divididas entre sus 19 salas.

El cambio se generó en el seminario “Modos de ver, modos de exhibir”, llevado a cabo en setiembre de 2018, guiado por quien fuera la curadora jefa Valeria Piccoli.

En diciembre de 2020 la Pinacoteca cumplió 115 años momento en el cual presentó su nuevo discurso narrativo.

Dentro de su nueva presentación, el museo ha dejado planteadas mas preguntas que respuestas. Esto lo ha conseguido a través de propuestas generadas a partir de nuevos diálogos entre obras provenientes de diferentes épocas en una amplia mezcla de lenguajes y soportes.

La nueva presentación se plasmó luego de que el staff de curaduría, se ocupara de presentar las obras de acuerdo a un criterio innovador, el cual viene siendo aplicado dentro de los mas prestigiosos museos de todo el mundo.

En virtud de nuestras impresiones e intereses actuales, las obras de arte ya no pueden ser leídas de acuerdo a un recorrido cronológico o lineal dentro de la historia de arte. Esto ha obligado a los museos a adoptar cambios mas dinámicos con una nueva pedagogía combinando épocas, soportes y lenguajes, para que el espectador tenga una participación mas activa a la hora de la comprensión de las obras.

Las revisiones en Brasil vienen siendo llevadas a cabo a partir de las nuevas posturas de análisis post colonización, al igual que la inclusión de parámetros de géneros y minorías, que hasta el siglo pasado no formaban parte del discurso artístico.

Ello, sumado a la enorme cantidad de información que los espectadores reciben, han obligado a los museos a buscar otras maneras de comprensión de sus obras para que sean al mismo tiempo de interés para los visitantes.

Varios museos asimismo han cambiado su colgado tradicional y actualmente las obras viendo siendo exhibidas a modo de fichas informativas y en algunos casos como el Museo de Arte de San Pablo, también se les puede ver el reverso de las mismas.

La consigna y gran desafío para los museos hoy día es encontrar la forma de atrapar el interés curioso de los espectadores quienes poseen nuevas posturas acorde a los tiempos actuales, amén de la necesaria justicia de revisión que el arte reclama.

Otras cuestiones de revisionismo han sido las provenientes de las omisiones de narrativas hegemónicas donde se han priorizado a artistas hombres, blancos, heterosexuales y cisgéneros, dejando fuera las obras previenes del ámbito femenino, así como las provenientes de minorías indígenas o de artistas afro descendientes.

Este criterio de exhibición denota el afán vanguardístico de la Pinacoteca, la cual reúne una selección de mil obras aproximadamente que parten desde el siglo XVII hasta la fecha, provenientes de mas de 400 artistas brasileños.

Las obras han ingresado al museo mediante adquisiciones y también por donaciones tanto de coleccionistas como de artistas.

Colecciones como la de José y Paulina Nemirovsky (2006), Roger Wright (2015), así como la proveniente de Evelyn e Ivoncy Ioschpe (2019), han ido ingresando a modo de donación a la Pinacoteca.

Estas diferentes modalidades de adquisición en algunos casos incluyen obras de artistas emergentes que a cambio de sus obras, reciben ayudas económicas para su formación en el exterior.

Para llevar a cabo el cambio de exhibición la Pinacoteca se valió de la participación de un grupo de teóricos que propiciaron un nuevo esquema que diera cuenta de las necesidades de interpretación del siglo XXI.

Eso también incluye los diferentes tipos de abordaje de obras de siglos anteriores de cara a la situación actual post colonialista que nos obliga a otro tipo de lecturas de acuerdo a los parámetros actuales.

Es impactante a la vez que enriquecedor, ver obras clásicas con marcos dorados con molduras barrocas, frente a fotografías, video o instalaciones, en un permanente diálogo que interpela y amplía el interés del visitante.

Para ello la Pinacoteca ha dividido su acervo en tres núcleos los que a su vez se subdividen en distintas temáticas.

El Núcleo 1, llamado «Territorios del arte” comprende seis salas con las temáticas siguientes: Ejercicios de verme, Atelier, Territorios del arte, Materias del arte, Ideas visibles y Representar el cuerpo.

El Núcleo 2, que lleva por título “Cuerpo y territorio”, parte de la sala 7 llegando hasta la 13 y aborda los temas de: Aproximaciones y contratiempos, Territorio hecho paisaje, Ciudad signo y abstracción, San Pablo: contemplación y suspenso, Conocimiento y dominación, Tierra como materia y Cualquier lugar.

Por su lado el Núcleo 3 denominado «Cuerpo individual cuerpo colectivo”, abarca desde la sala 14 hasta la 19 inclusive, con: Yo, tu y todos en el mundo, Sujetos, afectos y deseos, Cuerpo individual, cuerpo colectivo, Violencia y resistencia, Un país inventado, y Cuerpo: metáfora social.

La sala 1 reúne retratos y autorretratos de diferentes siglos, que nos ayudan a comprender la necesidad de los artistas de construirse a partir de sus retratos.

De la misma forma que los artistas del Renacimiento se valían de elementos para definir sus actividades, artistas afro descendientes e indígenas, se munían en sus autorretratos de pinceles, paletas y telas para perpetrar sus condiciones de artistas en algunas épocas que fueron desconsiderados dentro del ámbito artístico, mas aun en el caso de las mujeres.

También la nueva presentación examina como los artistas recepcionan su entorno dando forma al mundo que los rodea ya sea campo, floresta o ciudades, como crean otros imaginarios, que función cumple el cuerpo humano dentro de la sociedad, como incide la violencia proveniente de diferentes ámbitos y circunstancias, que hay detrás del arte, cual es la función del arte, que experiencia nos genera cuando nos enfrentamos a una obra de arte, los personajes nacionales impuestos versus los ausentes ,entre otras temáticas comunes a toda Latinoamérica.

Merece atención especial las críticas a la narrativa colonial impuesta por los europeos, donde la descolonización se viene ocupando de confrontar las estructuras de dominación que la historia colonial dejó como legado.

Así y dentro del nuevo relato museístico, la Pinacoteca genera la posibilidad de un nuevo abordaje sumamente enriquecedor para los espectadores.

Dentro del acervo se encuentran obras de destacados artistas como Tarsila do Amaral, Anita Malfatti, Candido Portinari, Lasar Segall, Lygia Clark, Waltercio Caldas, Tomie Ohtake, Anna Maria Maiolino, Artur Barrio, Antonio Dias, Pedro Escosteguy (padre de la también artista Solange Escosteguy Cardoso que estuvo casada con Antonio Dias y quien residió en Montevideo durante dos intervalos de 10 años en total) , Adriana Varejão, Rosângela Rennó, Beatriz Milhazes, Leda Catunda, Sonia Gomes, así como Jonathas de Andrade a quien tuvimos la oportunidad de conocer personalmente en la reciente edición de San José Foto, entre otros de artistas de menor trascendencia pero quienes también aportan y complementan una lectura cabal y global para la comprensión del arte actual.

La Pinacoteca se trata de un ejemplo muy cercano de la museología de vanguardia que aun nuestro país lamentablemente dista mucho de incorporar, insistiendo a través de un relato anacrónico y muy acotado que nos impide una lectura acorde a las circunstancias necesarias.

Cabe destacar que la Pinacoteca en la década de 1970 estuvo dirigida por la crítica de arte Aracy Amaral, muy allegada a nuestro país quien se ocupó de engrosar el acervo del museo.

Este museo tampoco se ha quedado allí. Dentro del mismo parque posee una sala nueva denominada Pinacoteca Contemporánea, la cual cuenta con majestuosas características edilicias propicias para las exposiciones de arte.

Actualmente y hasta el 14 de abril de 2024, se está llevando a cabo en la Galería Grande la que seguramente se trata de la exhibición de arte mas importante dentro de Brasil, como es el caso de “Cao Fei: el futuro no es un sueño”.

Cao Fei, (Cantón, China, 1978) cuenta con un larga carrera con reconocimiento internacional habiendo participado en las bienales de Shanghai, Moscú, Sydney, Venecia (2003, 2007 y 2015). También ha expuesto en el MoMA, Guggenheim y el Centro Pompidou, entre otros destacados museos del mundo.

La excelente puesta en escena así como la calidad de la muestra, dan cuenta del compromiso que la Pinacoteca tiene para con el arte internacional.