C5 – Historia del Arte a través de las Mujeres: Natalia Goncharova

Esta semana viajamos a Rusia para apreciar la obra de una de las mujeres de la vanguardia rusa del período pre revolucionario.

Abordar su vida implica un recorrido por las vanguardias europeas de principio del SXX que fomentaron el desarrollo de corrientes de arte en todo el mundo en forma unísona.

La vida de Natalia Goncharova tiene un gran paralelismo en varios aspectos con la de Tarsila do Amaral (San Pablo, 1886-1973). Formadas dentro de un ámbito donde la cultura y la educación formaba parte de los principios de sus familias, ambas se sintieron provocadas por las posturas de los artistas pos impresionistas como Cezanne, Van Gogh y Gauguin y al mismo tiempo ellas aplicaron dicha motivación para indagar dentro de las raíces de sus países respectivos.

Natalia Goncharova nació en Ladyzhino, Rusia, en 1881, el seno de una familia de la aristocracia rural rusa con una situación económica venida a menos. Algo similar también le sucedió a Tarsila cuando su familia pierde toda su fortuna.

Su carácter inquieto y su postura desafiante frente a la vida, la llevó a convertirse en una de las mas destacadas artistas de Rusia.

Fue una persona muy intrépida en todos los aspectos, siempre buscando nuevos desafíos y cambios muy al estilo de Pablo Picasso.

También su nombre lo podemos relacionar con Leonardo Da Vinci pues era fue una mujer “orquesta” siendo pintora, grabadora, diseñadora de textiles, de moda, de vestuario teatral y escenografía. Sus diseños eran usados por la emperatriz Alexandra Fiódorovna, esposa del zar Nicholas II.

Un aspecto no menor ,fue el hecho de ser la bisnieta del poeta, novelista y dramaturgo Alexander Pushkin (Moscú, 1799-1837), quien influyera en los principales escritores rusos del SXIX como fueron los casos de Dostoyevski, Gógol y Tolstoi entre otros.

Por sus venas corría la creatividad.

Analizar su vida implica tener presente algunos aspectos que fueron de una gran ayuda a su carrera, al mismo tiempo que nos permiten comprender mejor su obra.

El llamado Domingo Sangriento acaecido el 9 de enero de 1905, donde las tropas del zar Nicholas II abatieron a ciento cuarenta mil obreros y campesinos quienes se manifestaron frente al palacio de Invierno en San Petersburgo reclamando mejoras en la condiciones laborales.

A partir de ese momento trágico se gesta un espíritu aguerrido que va a caracterizar a estos artistas donde un buen número estaba formado por mujeres.

La Revolución de Octubre de 1917 pretendió usarlos a su favor pero su espíritu intrépido tampoco les dejaba indiferentes frente a la postura de los bolcheviques, razón por la cual no pudieron ser doblegados.

Otro aspecto a rescatar en forma indisoluble, fue la relación de Goncharova con su compañero de vida Mijáil Lariónov (Tiráspol, 1881-1964) con quien contrajo matrimonio. Trabajaron en forma conjunta creciendo y aportando nuevas ideas durante el resto de sus vidas.

Entre 1909 y 1913 crearon la corriente llamada Rayonismo con reconocimiento dentro del diccionario de los ismos.

Hablar de Goncharova nos obliga a citar a uno de los máximos creadores artísticos de las dos primeras décadas del SXX como fue el caso de empresario, director artístico y crítico de arte Sergei Diaghilev (Novgorod, 1872-1929).

Fue el creador de los Ballets Rusos (Paris, 1909) por donde pasasen los mejores bailarines, coreógrafos, pintos y músicos de la época. Entre los artistas que pasaron por su compañía podemos citar a George Braque, Henri Matisse, Pablo Picasso quien conoció allí a una de sus mujeres como fue el caso de la bailarina Olga Khoklhova a quien conoció en 1917.

Diaghilev formó un grupo de trabajo con Goncharova y su marido que los llevó a lograr el reconocimiento artístico por toda Europa.

La pareja le diseñaba el vestuario y las escenografías de las puestas en escenas de la obras teatrales.

Asimismo otros agentes artísticos que fomentaron el desarrollo tanto en Moscú como en San Petersburgo fueron los dos grandes coleccionistas Serguei Shchukin (Moscú, 1854 – 1936) e Iván Mórozov (Moscú, 1871-1921).

La participación de ambos coleccionistas en el mercado fue determinante. No solo acercaban las obras de la vanguardia europea a Rusia sino que también adquirían obra de artistas rusos propiciando creatividad y desarrollo.

Entender la vorágine tan fervorosa de esa época en Moscú implica considerar ese gran combo donde varios agentes se encontraban alineados en post de un renacer artístico. Los artistas con Goncharova al frente, comenzaron a prestar atención a las costumbres religiosas y culturales del país a la hora de crear desarrollando el Neoprimitivismo donde los lubok rusos fueron fuente de inspiración. Estas pinturas que adornaban las casas tanto interior como exteriormente, representaban un arte popular caracterizado por el uso de gráficos simples y narrativas derivadas de la literatura, de las historias religiosas así como de cuentos populares rusos.

Este mismo esquema de bucear en el arte popular fue el que utilizara también Tarsila do Amaral.

Sería muy enriquecedor poder hacer una muestra conjunta con la obra de ambas, donde seguro emanaría un guion curatorial partiendo de los hilos o de las musas que las inspiraron al mismo tiempo.

Natalia Goncharova vivió en Paris desde 1919 hasta su fallecimiento ocurrido en 1962. Siempre estuvo acompañada por su marido y acabó su vida en una situación económica apremiante.


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