Amsterdam, Holanda.
El porqué Rembrandt llevó a cabo el retrato “La ronda de la noche,” pintada en 1642, de forma diferente a sus colegas, fue la razón de la incomprensión de la misma durante tantos años.
La obra fue encargada por la Corporación de Arcabuceros de Ámsterdam para decorar el Groote Zaal, Gran Salón del Kloveniersdoelen, sede de la milicia.
Debido a esas dimensiones, Rembrandt realizó una obra de gran tamaño, aunque luego la obra fue recortada.
En ella aparece la milicia del capitán Frans Banninck Cocq en el momento en el que este da la orden de marchar al alférez Willem van Ruytenburch.
Desilusionados los 18 arcabuceros quienes le habían pago muy bien
con el fin de figurar retratados, no se vieron identificados en la pintura, razón para decepcionarlos.
Luego, sin el respeto y reconocimiento que la obra tenía, fue cambiada de lugar y mutilada para encajar en su nuevo nicho.
El paso del tiempo y el descuido de la misma, ocasionaron que la pintura quedara cubierta por el deterioro de sus barnices razón que le generaría su nuevo nombre cuando fue redescubierta.
Pasearse frente a esta obra, así como las de sus colegas quienes también recibieron el mismo encargo, es una experiencia saludable, mismo con la presencia de tanto público.




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