Río de Janeiro, Brasil.

Gran pérdida para el ámbito artístico brasileño.

El pasado 14 de julio, fecha por cierto muy importante para todos los franceses, falleció uno de los más importantes mecenas del arte en Latinoamérica.

Gilberto Chateaubriand había nacido en París en 1925. Era hijo de madre francesa y de Assis Chateaubriand (Umbuzeiro, Paraíba, 1892-1968), político, periodista, empresario, político y mecenas de arte, habiendo sido uno de los mayores empresarios en comunicación de Brasil, fundador del Museo de Arte de São Paulo Assis Chateaubriand (MASP).

La relación de Gilberto con su padre fue siempre tirante y recién fue reconocido cuando tenía 16 años.

El MASP, ubicado sobre la Avda Paulista de San Pablo, es el museo con el acervo más importante en cantidad y calidad de arte europeo.

Su colección está a la altura de cualquier museo de Europa.

Sin embargo Gilberto optó por donar 8.000 obras a otro de los más importante museos de Brasil cómo es el Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro (MAM), a raíz de las desconfianza que le generaba la administración del MASP.

Su colección es una de las más completas de arte brasileño, iniciada al principio del modernismo en 1917 llegando hasta las más recientes producciónes contemporáneas compuesta por obras de Lasar Segall, Candido Portinari, Lygia Pape, Lygia Clark y Hélio Oiticica entre otros destacados artistas.

El coleccionista, muy modernista en todos sus conceptos, era conocedor de las bellas artes y contaba con un gran espíritu filantrópico.

Fue sorprendido por la muerte a sus 97 años cuando se encontraba en su “fazenda” de São Paulo.